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Responsable: Dr. Alfons Endres. Email: alfonsendres10@gmail.com y alfons_endres@hotmail.com Teléfono: (+58)04128620515 Todos los temas aquí expuestos son de mi autoría, a menos que se especifique lo contrario.

viernes, julio 03, 2015

El nombre de Dios

Introducción
Esta parte del mundo, está fuertemente influenciada por la cultura Judeo-Cristiana,  credo que es a su vez la base de nuestra formación religiosa... Según la Tora (Libro Sagrado Hebreo) y la Biblia, fue Moisés (Mosheh) el primero que de forma directa pregunta el nombre a Dios según se relata en el capítulo 3 del Éxodo (Biblia, Antiguo Testamento).
3:13 "Contestó Moisés a Dios: Si voy a los israelitas y les digo: El Dios de los padres de ustedes me ha enviado a vosotros; cuando me pregunten: ¿Cuál es su nombre?", ¿qué les responderé?"
3:15 Siguió Dios diciendo a Moisés: "Así dirás a los israelitas: Yahveh (YaHWéH - Yod, Hé, Wav, Hé), el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi nombre para siempre, por él seré invocado de generación en generación."

Cuando desarrollamos la segunda frase del “Padre Nuestro” (1ro de Julio): “Santificado sea tu nombre”, eso significa que el Padre Celestial tiene un nombre que hay que conocer y santificar. ¿Y qué quiere decir santificar el nombre de Dios? Ésta es una parte importante de una ciencia muy antigua. Los Iniciados nos enseñan que todo lo que hacemos debe ser puro, luminoso y sagrado para que el nombre de Dios sea santificado toda nuestra vida, en el menor de nuestros actos...
Desarrollo
Para entender mejor la información antes expuesta, me gustaría complementarla con los conocimientos que nos ofrece la Cabala hebrea (aunque desarrollada por el pueblo Judío, es un legado de humanidad), a través de las enseñanzas del Maestro Aivanhov. Pienso que un nombre “solo” no nos  sirve de mucho, amenos que entendamos su verdadera dimensión y significado practico.
Según  la Cábala,  el nombre  de Dios  tiene cuatro  letras  y se  escribe   ה ,ו ,ה ,י.  Yod, Hé, Wav, Hé. Las cuatro letras del nombre de Dios corresponden a  los  cuatro  principios  que  actúan  en  el  hombre:  espíritu,  alma, intelecto y corazón, Yod (י) es el principio masculino creador, la fuerza santa  primordial  que  está  en  el  origen  de  todos  los  movimientos,  el espíritu. La segunda letra, Hé (ה) representa el principio femenino, el alma,  que  absorbe,  conserva,  protege  y  permite  al  principio  creador trabajar en ella. La tercera letra, Wav (ו) representa el hijo, que nace de la  unión  de  los  dos  primeros  principios  masculino  y  femenino,  el padre y la madre. Es  el  primer  hijo  de  esta  unión  y  se  manifiesta  también  como principio activo, pero a otro nivel. El hijo es el intelecto, que camina siguiendo la estela de Yod (י), el padre, el espíritu, y podéis observar, por  otra  parte,  que  Wav  (ו)  es  una  prolongación  de  Yod.  La  letra siguiente,  Hé  (ה), es idéntica a la segunda que, ya os lo dije, es el alma, la madre. Representa el corazón, la hija, que es la repetición de la madre.” Las cuatro letras del nombre de Dios representan, pues: el espíritu (el padre), el alma (la  madre), el intelecto (el  hijo), y el corazón (la hija).

Si el espíritu domina en vosotros, sois como el padre; pero si es el alma, vuestras cualidades son las de la madre. Si es el intelecto el que tiene la preponderancia, sois como el hijo, y si es vuestro corazón, sois semejantes a la hija. Volvemos a encontrar estos cuatro principios en el rostro, porque el rostro del hombre está construido a imagen del rostro de Dios. Los ojos representan Yod, el espíritu, y las orejas, Hé, el  alma.  La  nariz  representa  Wav,  el  intelecto,  y  la  boca,  la  segunda Hé, el corazón.

En resumen, hay, pues, cuatro fuerzas que están en correspondencia:
י Yod, el espíritu, corresponde a los ojos.
ה Hé, el alma, corresponde a las orejas, 
ו Wau, el intelecto, corresponde a la nariz,
ה Hé, el corazón, corresponde a la boca.

Estas  cuatro  fuerzas  representan,  pues,  los  cuatro  sentidos: la vista,  el  oído,  el  olfato  y  el  gusto.  El  quinto  sentido  es  el  tacto,  las manos con las que trabajamos. A las cuatro letras del nombre de Dios se añade, pues, una quinta letra, schin ש, que encontramos en medio del nombre  de Jesús, Iéschoua  ה ,ו,ש ,ה ,י,    y  que  es  el  símbolo  de  la  formación,  de  la  encarnación  de  Dios  en  la  materiaA  través  de Jesús,  el  espíritu,  el  alma,  el  intelecto  y  el  corazón  de  Dios  se encaman en el plano físico para ser visibles y tangibles. Es el Verbo que se hizo carne. Jesús es la encarnación de Dios en la materia; él es quien   da   a   los   cuatro   principios   divinos   la   posibilidad   de manifestarse.  Por  eso  Jesús  es  representado  también  por  los  cinco dedos de la mano, las cinco virtudes: el amor, la sabiduría, la verdad, la justicia y la bondad, características del hombre perfecto.
Jesús es el hijo de Dios descendido a   la   Tierra   para   mostrarnos   cómo debemos    actuar.    Si    nos    quedamos solamente  con  el  espíritu,  el  alma,  el intelecto  y  el  corazón,  sin  manifestarlos en  el  plano  físico,  no  conoceremos  al Señor. Quizá le conozcamos cuando nos vayamos  al  otro  mundo,  pero  ya  será demasiado  tarde,  y  no  nos  servirá  de nada. Es aquí donde debemos conocerlo para  saborear  la  vida  eterna.  Tenemos  un  espíritu,  un  alma,  un intelecto  y  un  corazón,  pero  eso  no  basta:  es  preciso  también manifestar sus cualidades a través del cuerpo físico.

 “El grano de mostaza” Cap. 1. De: Aivanhov Omraam Mikhael

"Yo Soy". De: Alfons Endres

miércoles, julio 01, 2015

¿Y yo que puedo hacer? - Vivir más y mejor (Clínica Mayo)

 Las 7 estrategias para vivir más y mejor

Especialistas en distintas áreas de la medicina, de la Clínica Mayo, en Estados Unidos, explican cuáles son las siete reglas de oro a la hora de mejorar la calidad y el tiempo de vida.

"El envejecimiento es un proceso inevitable y nada puede garantizar que uno vivirá más y mejor, pero estas consideraciones probablemente ayuden a colocar las piezas en su lugar para que los años que tenemos por delante los vivamos con mayor felicidad y salud", argumenta un equipo de médicos de la Clínica Mayo, en Estados Unidos, tras elaborar una guía sobre cuáles deben ser las prioridades si se busca mejorar la calidad de vida. A continuación, citamos las estrategias que aconsejan tener en cuenta estos expertos para lograrlo:

ESTRATEGIA 1: Mantenerse físicamente activos.
Aún en cantidades moderadas, la actividad física puede ayudar a disfrutar la vida y evitar enfermedades que muchas personas creen erróneamente que sobrevienen con los años. El ejercicio físico no tiene que ser doloroso o agotador para aportar beneficios. Incluso las actividades físicas de una intensidad moderada, tales como las caminatas, la jardinería o cortar el césped, pueden mejorar la salud cuando son realizadas con regularidad.
Las personas que son físicamente activas o que se ejercitan aunque sea 30 minutos por día pueden reducir el riesgo de morir de forma prematura.
Además, la actividad física regular puede ayudar a prevenir o controlar:
* Ataques cardíacos.
* Accidentes cerebrovasculares (ACV).
* Hipertensión arterial.
* Diabetes.
* Osteoporosis.
* Osteoartritis.
* Caídas y quebraduras óseas.
* Algunos tipos de cáncer.
* Depresión y ansiedad.
A algunas personas les cuesta incorporar en sus vidas el ejercicio físico, en especial aquellas que no están en forma o tienen una agenda demasiado cargada, pero no deben olvidarse que -como se dijo- hay muchas actividades que mantienen el cuerpo en movimiento y ayudan a obtener los beneficios sin la necesidad de ir a un gimnasio o salir a correr. El secreto es encontrar la que más se adapta a los gustos y posibilidades de cada uno.

ESTRATEGIA 2: Ejercitar la mente.
Así como la actividad física mantiene el cuerpo fuerte, la actividad mental mantiene el cerebro "despierto" y ágil.
Las personas que continúan aprendiendo y desafiándose a sí mismas -aprendiendo un idioma extranjero, iniciando una nueva carrera, o haciendo palabras cruzadas- pueden fortalecer su memoria. 
Sin importar la edad, un cerebro activo produce nuevas conexiones entre las células nerviosas (neuronas), lo que permite la comunicación entre estas células.
Si bien es cierto que los adultos mayores en general aprenden de forma diferente que los jóvenes y que tienen mayor dificultad para recordar información rápidamente, la vejez no es un tobogán directo hacia la demencia. Numerosos estudios demuestran que las personas mayores pueden -y de hecho logran- aprender nuevas cosas y aprenderlas bien.
Los ejercicios de memoria y técnicas para recordar pueden mejorar la memoria y enriquecer el aprendizaje.
Buscar nuevas oportunidades de aprendizaje, practicar las destrezas ya adquiridas y enfrentar cambios puede ayudar a estar mentalmente en forma, sin importar que edad se tenga.

ESTRATEGIA 3: Hacer de la salud una prioridad.
Por simple que parezca, es una de las mejores y más prácticas elecciones que se pueden hacer para encarar una vida más saludable y larga.
La salud depende en gran medida de la responsabilidad con que cada uno la tome. De muchas maneras, cada día se decide cuán sano uno será. No todas las enfermedades son evitables, por supuesto. Pero se puede disminuir el riesgo de padecer muchas de las más serias, tomando buenas decisiones cada día al:
* Comer alimentos sanos.
* Mantener un peso saludable.
* Recibir cuidado médico regular.
* Tomarse el tiempo para escuchar al propio cuerpo.
Hacer de la salud una prioridad no significa renunciar a las comidas o actividades favoritas ni preocuparse por la salud al punto de dejar de lado otras cuestiones. Se trata de un equilibrio -asegurándose de que ocuparse de la salud sea tan importante como cumplimentar cualquier otra de las responsabilidades-.

ESTRATEGIA 4: No fumar.
Otra de las principales estrategias recomendadas por los expertos para vivir una vida más larga y saludable es no fumar.
Los fumadores simplemente tienen más riesgo de morir antes. Cerca de la mitad de los fumadores morirán por una enfermedad causada por el tabaquismo. El tabaquismo produce más muertes que el Sida, el abuso de drogas, el alcoholismo, los incendios, los accidentes automovilísticos, los homicidios y los suicidios combinados.
Y no sólo los adultos están en riesgo. Los niños expuestos al "humo de segunda mano" (fumadores pasivos) tienen mayor riesgo de desarrollar enfermedades respiratorias, asma e infecciones auditivas. El tabaquismo en mujeres antes y después del nacimiento de su bebé constituye para el recién nacido un factor de riesgo de sufrir muerte súbita.
La buena noticia es que sin importar qué edad se tenga, al dejar de fumar se reduce drásticamente el riesgo de enfermedad. "Nunca es demasiado tarde para parar", explica el doctor Richard Hurt, director del Centro de Dependencia a la Nicotina de la Clínica Mayo.

ESTRATEGIA 5: Invertir en las relaciones humanas más significativas para uno.
Cuando se trata del propio bienestar, no hay que subestimar la importancia de aquellas personas cercanas a uno. Ya sea la pareja, niños o amigos íntimos, las personas que se cuentan como "de la familia" pueden jugar un papel importante en la salud personal.
La fortaleza de las relaciones con la pareja o la familia puede motivar que uno se cuide a uno mismo: comiendo sano, ejercitándose y recibiendo cuidado médico regular.
La pareja y la familia pueden ser además un "amortiguador" frente a los diversos factores de estrés de la vida cotidiana.
Cuando la salud de una persona no está bien, la familia puede ayudar a que se reciba el cuidado médico necesario para controlar la enfermedad con mayor éxito.
Como un jardín, las relaciones familiares requieren atención. No se puede pretender gozar de los beneficios de las relaciones a largo plazo si no se invierte en ellas. No hay una única manera correcta de mantenerse conectado con la familia. Lo importante es hacerlo.

ESTRATEGIA 6: Tomarse tiempo para las cosas que disfruta.
¿Disfruta de la jardinería? ¿Jugar a las cartas? ¿Viajar? ¿Pasar tiempo con sus nietos? Aunque lo sorprenda, estas actividades no sólo aportan disfrute sino que también pueden beneficiar la salud.
La ciencia está empezando a documentar los beneficios para la salud de las actividades recreativas. Un número creciente de estudios sugieren que tomarse tiempo para hacer las cosas que uno disfruta puede ayudar a sentirse mejor con uno mismo y más satisfecho con la vida. Cuando una persona se siente así, es más probable que se ejercite físicamente, coma saludable, obtenga atención médica regular y se mantenga en contacto con amigos y familiares... todos ellos factores que pueden beneficiar física y mentalmente a las personas.
Por eso, ya no resulta sorprendente que tomarse el tiempo para hacer las cosas que a uno le gustan es una de las prescripciones para vivir de manera saludable y por más tiempo.

ESTRATEGIA 7: Mantenerse conectado con la comunidad.
Tanto siendo voluntario por una causa o simplemente teniendo contacto con otras personas, ser parte de un grupo humano puede aportar beneficios físicos y mentales.
Las investigaciones demuestran un vínculo entre la calidad de vida y la participación comunitaria. Es puro sentido común: si uno se siente necesitado y parte de la propia comunidad, seguramente se sentirá mejor consigo mismo y disfrutará más de la vida.
Mantenerse en contacto con los vecinos también puede sumar años de vida. La ciencia ha comenzado a documentar los efectos del apoyo social sobre la salud. Un número creciente de evidencias sugieren que mantenerse en contacto con otros puede jugar un rol importante en la posibilidad de recuperarse de una enfermedad o incluso alargar la vida.
Mantenerse involucrado en la comunidad en la que se habita puede lograrse de distintas maneras, según los gustos de cada persona: siendo voluntario de alguna organización o participando en el coro de la parroquia. Participar en las actividades de la comunidad es mucho más importante que en qué tipo de actividad se participe.

Extraído de: “viva más, viva mejor”
Consejos personales de los expertos de la Clínica Mayo.


Ver también: Salud Hoy (publicado el 25 de Febrero)   y  Salud hoy - ¿Y yo que puedo hacer? (publicado el 2 de marzo).


PADRE NUESTRO

"Padre Nuestro, que estás en los Cielos,
Santificado sea Tu Nombre,
Venga a nosotros Tu Reino,
Hágase Tu Voluntad,
así en la tierra como en el Cielo.
El pan nuestro de cada día dánoslo hoy,
y perdona nuestras ofensas,
así como nosotros perdonamos a quiénes nos ofenden,
y no nos dejes caer en la tentación: 
porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, 
por todos los siglos. Amén."

Introducción
Voy a tratar ahora de mostraros el significado de estas tres primeras frases, pero no podré decíroslo todo, porque se trata de algo inmenso. Vais a ver... Jesús puso en estas frases toda una ciencia muy antigua que ya existía mucho antes que él y que había recibido de la tradición, pero la resumió y la condensó tanto que sólo los Iniciados pueden comprenderla.
Toda la ciencia que poseía quiso resumirla en el “Padrenuestro” con la esperanza de que los hombres que lo recitasen y meditasen plantaran esta semilla en su alma, la regarían, la protegerían y la cultivarían, para descubrir lo que es este árbol de la ciencia que nos dejó. Sí, pero es una lástima, recitan esta oración sin reflexionar, maquinalmente.
“Padre nuestro que estás en los Cielos, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad, así en la Tierra como en el Cielo...” Con estas tres peticiones empieza ya el trabajo espiritual, iniciático, el trabajo mágico por excelencia.
“Padre nuestro que estás en los Cielos”, significa que existe un Padre celestial que lo ha creado todo, de quien depende todo, que es el Dueño del universo, pero que también existen varios Cielos, varias regiones a las que se llaman “Cielos”, con sus habitantes y toda una organización extraordinaria. Y el Padre Celestial habita, pues, en los Cielos.
“Santificado sea tu nombre Eso significa que el Padre Celestial tiene un nombre que hay que conocer y santificar. ¿Y qué quiere decir santificar el nombre de Dios? Ésta es una parte importante de una ciencia muy antigua. Los Iniciados nos enseñan que todo lo que hacemos debe ser puro, luminoso y sagrado para que el nombre de Dios sea santificado toda nuestra vida, en el menor de nuestros actos. Es todo un programa, pues, el que Cristo nos ha trazado; no se menciona en detalle, pero veréis que es la consecuencia lógica de las explicaciones que voy a daros.
“Venga a nosotros tu Reino”. Eso significa que existe un Reino de Dios, con sus leyes, su organización, su armonía, y con todas las cualidades de un reino perfecto, ideal, unas cualidades que todavía no nos podemos imaginar, pero de las que tenemos a veces una visión fugaz en los momentos más maravillosos y más espirituales de nuestra vida. Porque sólo cuando nos encontramos en estos estados maravillosos empezamos a comprender lo que es el Reino de Dios. Si no, ¡si tuviéramos que imaginarnos los reinos terrestres!... Los reinos terrestres están lejos de ser perfectos: en ellos hay continuamente peleas, gritos, motines, revoluciones, locuras. Eso no es el Reino de Dios. Sin embargo, este Reino puede instalarse en la Tierra, existe toda una Enseñanza y unos métodos para hacerlo venir. Porque no basta con pedirlo. Pedirlo, sí, se está pidiendo desde hace miles de años, pero no viene porque se pide sin hacer nada para que venga.
“Hágase tu voluntad, así en la Tierra como en el Cielo”, significa que la voluntad de Dios debe ser realizada en el plano físico, en el cuerpo físico, tal como ya ha sido realizada arriba, en el Cielo.
El hombre ha sido creado a imagen de Dios, es decir que, como Él, es una trinidad: intelecto, corazón, voluntad. Las tres primeras frases del "Padrenuestro" corresponden a esta trinidad.
Desarrollo
Desearía rescatar de esta conferencia algunas claves para vivir  el: "Venga a nosotros tu Reino"... pero antes debemos comenzar por: “Santificado sea tu nombre”. Pero no podemos santificar nada si nosotros mismos no somos santos. Lo mismo que no podemos purificar nada si nosotros mismos no somos puros. Sólo la luz puede, pues, santificar, puesto que ella misma es santidad. La luz en el hombre se encuentra en el plano mental, en su cabeza, en sus pensamientos. Es ahí donde santifica en primer lugar el nombre de Dios. Pero para ello debe saber que la luz no puede entrar en la cabeza de aquél que no ha descorrido las cortinas. El hombre quiere que la luz venga, pero deja las cortinas corridas y la luz no puede entrar. La luz no es poderosa hasta este punto. Es todopoderosa para hacer mover los mundos, es verdad, pero no puede descorrer una cortina, somos nosotros los que debemos hacerlo. Cuando están descorridas las cortinas la luz entra inmediatamente en nuestra habitación, es decir, en nuestra cabeza, en nuestro intelecto, y todo se vuelve claro. Después, cuando hemos comprendido, cuando sabemos que un pensamiento luminoso puede santificar todos los objetos y todas las criaturas, debemos lanzarnos a hacer este trabajo y vivir, desde principio a fin de jornada, con el gozo extraordinario de poder, por fin, santificar todo lo que tocamos, todo lo que comemos, todo lo que miramos.
Sí, el mayor gozo que existe en el mundo, mis queridos hermanos y hermanas, es el de llegar a la comprensión de esta práctica cotidiana y, por todas partes a donde vayamos, bendecir, iluminar, santificar. Sólo entonces cumplimos el precepto que Cristo nos dio. Pero repetir: "Santificado sea tu nombre", sin hacer nada para santificarlo, incluso en nuestros actos, es no haber comprendido nada. Y eso es justamente lo que sucede: este trabajo, que es el más formidable de todos, todavía no ha empezado en el mundo. Sólo algunos sacerdotes, algunos Iniciados, algunos yoguis, piensan en purificarlo todo, en santificarlo todo, pero eso no basta, porque, mientras tanto, los demás lo destruyen, ensucian y profanan todo con su ignorancia y su grosería.
Para ser más preciso todavía, os diré que la verdadera santificación se produce más arriba de la región del pensamiento y de la inteligencia, que es también la región de la purificación. La santificación afecta al alma y al espíritu. Éste es el mundo de la supra consciencia, del éxtasis, el mundo de todas las revelaciones y de toda la beatitud. El que se consagra a santificar sin cesar el nombre de Dios puede llegar hasta el éxtasis.
Con la segunda petición: "Venga a nosotros tu Reino", descendemos al mundo espiritual del corazón. El nombre de Dios debe ser santificado en nuestra inteligencia, pero es en nuestro corazón en donde su Reino debe venir a instalarse, porque el Reino de Dios es un reino de amor, de bondad, de generosidad, de caridad y de armonía entre todas las criaturas, es el reino del gozo, de la felicidad y de la paz que debe instalarse en el corazón de todos los hombres. Este Reino no es un lugar, sino un estado interior en el que se refleja todo lo que es bueno, generoso y desinteresado. De este Reino decía Jesús hace dos mil años: "Está cerca", pero todavía no ha venido, y no vendrá ni siquiera dentro de veinte mil años si nos contentamos con esperar externamente su venida sin hacer nada dentro de nosotros. En realidad, este Reino ya ha venido para algunos; para otros viene, y para otros aún, vendrá... Para los Maestros y los Iniciados ya ha venido desde hace mucho tiempo; para los discípulos viene; y para la masa vendrá... ¡pero no se sabe cuándo!

Fragmentos de la Conferencia del 
7 de mayo de 1961 dictada por el Maestro: OMRAAM MIKHAÉL AIVANHOV
 “PADRE NUESTRO...”, “AL PRINCIPIO ERA EL VERBO”-Capítulo III.

Sentido de la Vida - Sentido del Amor



Dudo que haya algún médico que pueda contestar a esta pregunta en términos generales, ya que el sentido de la vida difiere de un hombre a otro, de un día para otro, de una hora a otra hora. Así pues, lo que importa no es el sentido de la vida en términos generales, sino el significado concreto de la vida de cada individuo en un momento dado. Plantear la cuestión en términos generales puede equipararse a la pregunta que se le hizo a un campeón de ajedrez: "Dígame, maestro, ¿cuál es la mejor jugada que puede hacerse?" Lo que ocurre es, sencillamente, que no hay nada que sea la mejor jugada, o una buena jugada, si se la considera fuera de la situación especial del juego y de la peculiar personalidad del oponente. No deberíamos buscar un sentido abstracto a la vida, pues cada uno tiene en ella su propia misión que cumplir; cada uno debe llevar a cabo un cometido concreto. Por tanto ni puede ser reemplazado en la función, ni su vida puede repetirse; su tarea es única como única es su oportunidad para instrumentarla.
Como quiera que toda situación vital representa un reto para el hombre y le plantea un problema que sólo él debe resolver, la cuestión del significado de la vida puede en realidad invertirse. En última instancia, el hombre no debería indagar cuál es el sentido de la vida, sino comprender que es a él a quien se indaga. En una palabra, a cada hombre se le pregunta por la vida y únicamente puede responder a la vida respondiendo por su propia vida; sólo siendo responsable puede dar una respuesta a la vida. De modo que la esencia íntima de la existencia humana está en su capacidad de ser responsable.
El sentido del amor
El amor constituye la única manera de aprehender a otro ser humano en lo más profundo de su personalidad. Nadie puede ser totalmente conocedor de la esencia de otro ser humano si no le ama. Por el acto espiritual del amor se es capaz de ver los trazos y rasgos esenciales en la persona amada; y lo que es más, ver también sus potencialidades: lo que todavía no se ha revelado, lo que ha de mostrarse. Todavía más, mediante su amor, la persona que ama posibilita al amado a que manifieste sus potencias. Al hacerle consciente de lo que puede ser y de lo que puede llegar a ser, logra que esas potencias se conviertan en realidad.
El amor es un fenómeno tan primario como pueda ser el sexo. Normalmente el sexo es una forma de expresar el amor. El sexo se justifica, incluso se santifica, en cuanto que es un vehículo del amor, pero sólo mientras éste existe. De este modo, el amor no se entiende como un mero efecto secundario del sexo, sino que el sexo se ve como medio para expresar la experiencia de ese espíritu, de fusión total y definitivo, que se llama amor.


Viktor Emil Frankl, (1905 - 1997, Viena, Austria) fue un neurólogo y psiquiatra austriaco, fundador de la Logoterapia. Sobrevivió desde 1942 hasta 1945 en varios campos de concentración nazis, incluidos Auschwitz y Dachau, pero tanto su esposa como sus padres fallecieron en los campos de concentración.