1 Cuida tu cuerpo: Practicar ejercicio y comer sano son los dos pilares sobre los que
se asienta la salud física y una forma de quererse y valorar lo que uno tiene.
2 Cuida tu mente: La ansiedad repercute negativamente en tu salud física y mental.
Practica actividades que favorezcan la relajación e intenta evitar las
situaciones estresantes.
3 Valora tus aptitudes: Si elogias las virtudes de los demás, por qué no haces lo mismo
contigo. Mímate un poquito más.
4 Reconoce tus limitaciones: No te pongas metas
inalcanzables. Cada uno de nosotros sabe de lo que es capaz, y ser consciente
de ello nos ayudará a evitar frustraciones.
5 Ten paciencia: Que las cosas no te salgan como querías a la
primera no significa que nunca vayas a hacerlo bien. Si eres perseverante,
lograrás superar muchos obstáculos.
6 Acepta que, a veces, también te equivocas: No te culpabilices porque las cosas no han salido como esperabas.
Intenta aprender de los errores, pero no dejes que un fracaso te impida seguir
adelante o dejar escapar una oportunidad. Todos nos equivocamos y recuerda que,
de los errores, también se aprende.
7 Acepta
las críticas ajenas, pero no vivas pendiente de lo que los demás piensan de ti: Escucha los consejos y
opiniones de aquellos que te aprecian, intenta buscar el lado positivo de las
críticas, pero ten en cuenta que al final tu decisión debe prevalecer sobre los
puntos de vista ajenos.
8 Aprende a decir no: No pretendas complacer
siempre a todo el mundo, sobre todo si es a costa de tu propia insatisfacción.
Decir no en determinadas ocasiones es una manera de que los demás respeten tus
puntos de vista y tus decisiones.
9 Aumenta la autoestima de los que te rodean: Reconoce y valora tú también
las aptitudes que ves en los demás y demuéstrales la importancia que ellos
tienen en tu vida; eso contribuirá a aumentar su autoestima y, de paso, también
la tuya.